El alfajor es mucho más que una golosina; es un legado culinario que viaja desde el antiguo Al-Ándalus hasta el Río de la Plata. Su nombre proviene del vocablo hispano-árabe "al-hasú", que significa "el relleno".
Llegó a América con los conquistadores españoles alrededor del *siglo XV*, pero fue en el Virreinato del Río de la Plata donde, con el cremoso Dulce de Leche, adquirió su forma moderna y distintiva.